Flor Lanusse nació en Buenos Aires en el año 1988, es cantante, compositora, recopiladora, sonoterapeuta e instructora de mantras y cantos de la tierra. Confesa apasionada del universo musical, sitúa su primer acercamiento al canto en la etapa de su niñez, cuando entonaba canciones de cuna a sus hermanos más pequeños.
Paralelamente a su formación artística, se ha capacitado en Arteterapia Junguiana, disciplina que utiliza el arte como medio expresivo, profundizando en aquellos aspectos relacionados al inconsciente y su conexión con la espiritualidad. También es aprendiz del Camino Rojo, una tradición oral que se remonta a los pueblos originarios de América, quienes lo siguen, buscan mantener la armonía en el ecosistema de nuestro planeta y el respeto por todas las especies que lo habitan, basados en la cosmovisión indígena. Ambos saberes, le facilitan el uso de los símbolos como herramienta para la sanación, el arte y la potencialidad del Ser.
En el año 2012, fue una de las fundadoras de la chacra comunitaria Chakra Corazón ubicada en el Sur del país donde residió por un lapso de 7 años. La huella profunda que le dejó esta experiencia de vida ha ampliado su horizonte artístico, vinculándola también con otras disciplinas como el teatro, la danza contact , el clown y el acro yoga.
Heredera del gusto por la poesía y la escritura, vertiente de su linaje materno y con la convicción y fortaleza legada de su padre, Flor compone canciones que abordan los temas que la conmueven, privilegiando su profundo amor por la naturaleza y la esencia más pura del Ser.
De esta manera, sus canciones proponen un viaje sensorial plagado de imágenes visuales donde la Pachamama se personifica en paisajes, bosques, montañas, ríos y selvas.
Simultáneamente, el predominio de sonidos orgánicos armoniza las vibraciones energéticas, transportándonos a dimensiones originarias de la matriz vital que nos recuerdan lo sagrado de la vida, en una constante búsqueda del despertar de aquellas conciencias aún dormidas.
Dueña de un espíritu rebelde, su compromiso con la humanidad y la salud de la tierra trasciende geografías, fronteras y lenguas denunciando la crueldad y reclamando por la recuperación de los derechos fundamentales como el de la libertad en toda su amplitud.
En diciembre del 2020 se editará en formato digital Célula Sana, la primera de una serie de canciones que serán lanzadas alternativamente y que formarán parte de su primer disco.
La pieza musical que cuenta con la producción de Nicolás Bruschi (Sidirium), fusiona los vocales casi rapeados con elementos de la música latinoamericana y el folk digital, ensamblados sobre una base electrónica de increíble calidez.
Célula Sana, rinde homenaje al cuerpo como vehículo indispensable de nuestra vitalidad, apelando a los sentidos y a la esencia espiritual por encima de aquellos mandatos culturales que tienden a imponernos sus formas arbitrariamente, como refiere la propia artista:
Le hice un canto al cuerpo en agradecimiento y reconociendo que soy una partícula, una célula de un cuerpo más grande que es la tierra y a su vez es el cosmos.
De esta manera, Flor hace su debut en la escena musical, con una propuesta que nos invita a celebrar el milagro de la vida y a reflexionar acerca de asumir nuestra responsabilidad sobre ella.
Su mensaje final, llega a nuestros oídos como una caricia para el alma, quizás en el momento exacto en que la humanidad necesita tomar conciencia del verdadero rol que le toca asumir dentro de la maquinaria del universo. Si uno comprende este rol, puede desplegar su máximo potencial en resonancia con el cosmos y comprendiendo que el universo es uno y uno es el universo.
La música así, se convierte otra vez en un puente, conectando lo sagrado y lo profano, la materia y el espíritu, el arte y la vida.
Curaduría a cargo: Marianella Baladán
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